Ante la inminente llegada del Fenómeno El Niño con sus consecuentes lluvias y posibles huaicos, la Autoridad Nacional del Agua (ANA) anunció la instalación de 12 barreras dinámicas y 35 diques de contención en 21 quebradas, distribuidas en distritos como Chaclacayo (9), Santa Eulalia (2), Ricardo Palma (1), Cieneguilla (1) y Lurigancho-Chosica (8) durante este año. Estas medidas buscan fortalecer la preparación y reducir los riesgos asociados al fenómeno climático.
La ANA detalló en un comunicado que para la instalación de las estructuras se han desarrollado 21 proyectos de inversión pública de gran envergadura. A diferencia de las actividades de limpieza y descolmatación, estos proyectos tienen un cronograma de obra que comenzó con la asignación de un presupuesto de S/. 72 millones. Además, se destacó que en el año 2015 se instalaron 22 barreras dinámicas en 9 quebradas del distrito de Lurigancho-Chosica, distribuidas en las quebradas Carosio (4), Pedregal (4), Rayos de Sol (2), Mariscal Castilla (3), La Libertad (2), Santo Domingo (2), Quirio (2), La Ronda (2) y Huampaní (1).
El jefe de la ANA, Juan Carlos Castro, informó a las autoridades en el Centro de Operaciones de Emergencia (COEN) que la implementación de las barreras dinámicas sigue procesos técnicos y administrativos propios de una obra de inversión. Destacó que las geomallas, estructuras de alta tecnología, no se construyen en el Perú y deben ser importadas desde Suiza. Esto resalta la complejidad y la necesidad de coordinación para asegurar la efectividad de estas medidas ante el Fenómeno El Niño.
“La construcción de diques e instalación de barreras dinámicas estará a cargo de la empresa que, en diciembre del 2023, se adjudicó la buena pro para la elaboración del expediente técnico, lo cual concluirá y se aprobará en el presente mes”, mencionó.
“Después de muchos años no se ha invertido en estas obras de infraestructura de protección y, en pocos meses, hemos intensificado las acciones para colocar las estructuras”, agregó.
El diseño de una barrera dinámica, según explicó el jefe de la ANA, se adapta a las características específicas de cada quebrada, considerando factores como extensión, morfología y ubicación. Estas estructuras están compuestas por mallas de anillos de acero con recubrimiento galvanizado y anclajes de entre 5 y 9 metros (de alta resistencia) que se entierran en el cerro para mejorar su resistencia. A diferencia de los diques de concreto, la principal característica de estas barreras es su flexibilidad para contener diversos volúmenes de material sólido.
Es importante destacar que las geomallas instaladas en 2015 fueron entregadas a las autoridades locales mediante actas y convenios entre la ANA y el municipio de Chosica. A partir de esa fecha, el mantenimiento de estas estructuras quedó bajo la responsabilidad del gobierno local. Como dato adicional, la ANA anunció que proporcionará asistencia técnica para elaborar un informe sobre el estado de las geomallas, apoyando al municipio de Lurigancho-Chosica en la gestión de su mantenimiento.
Fuente: El Comercio