Dentro de la gestión de las empresas, encontramos que podemos contar con una gran cantidad y variedad de información, y por otro lado, un breve tiempo para poder realizar un análisis exhaustivo de cada uno de dichos factores, por lo cual debemos priorizar y tomar una decisión en base a dicha elección. De acuerdo a esto y a la presión existente, debemos hacernos esta pregunta: ¿cómo puedo asegurarme que mi elección es la más probablemente correcta? Es aquí donde nos puede ayudar el Principio de Pareto.
Vilfredo Pareto (1848 – 1923), fue un filósofo, economista y ingeniero francés que en 1896, formuló dicho principio en su libro “Cours d’économie politique”, donde afirma, que del 80% de las resultados que se obtienen en algo, son causados solamente por apenas el 20% de todas las acciones que se utilizaron para lograr dicho resultado. Esta teoría está basada en el conocimiento empírico y la observación, así por ejemplo, podemos darnos cuenta en la economía que un 20% (a lo más) de la sociedad humana maneja el 80% (o más) de la riqueza de una Nación. En el transcurso de un siglo desde esta afirmación, los estudiosos han podido verificar que esto se cumple en todos los ámbitos de la sociedad, llegando inclusive a las empresas. Ahora bien, por ser una regla empírica, no necesariamente tiene que ser un 20/80, puede ser un 10/70, 4/50, 7/65, etc. esto dependerá de la realidad y el entorno que se esté analizando.
Para poder entender lo señalado, vamos a plantearnos la siguiente situación que puede ocurrir: Imaginemos que tenemos un almacén de variada mercadería, cuyo número de ítems es muy alto (1,000 artículos o más) y necesitamos información urgente (como un inventario) y solo disponemos de dos días poder reportar la información. Hacer esto es físicamente imposible, por lo que debemos priorizar lo que necesitamos revisar. Pero ¿cuáles?.
Para resolver esto, primero, debemos identificar a todos nuestros artículos diversos por un medio o indicador que los agrupe (por ejemplo: puede ser el valor monetario del stock actual o también el nivel de rotación/ventas que tengan). Seguido, se debe multiplicar los stocks por dicho indicador, obteniendo totales el cual deberá ordenarse de mayor a menor. Finalmente, se deberá tomar rangos de valores a criterio, los cuales van a definir las zonas A, B, C, donde se priorizará revisar los artículos que están en la zona A.
Vamos a ver esto con un ejemplo con 6 artículos, los cuales se agruparán por su valor de precio del mercado, permitiendo obtener el siguiente cuadro:
Como vemos en el cuadro, se ha multiplicado los stocks de almacén por su precio de venta, totalizando y se ha ordenado de mayor a menor, seguido de calcular su porcentaje individual (ejemplo: N367: 42,619.0/68,245.7 = 62%). Estos porcentajes se suman acumulando (ejemplo: E674: 62%+14%+11%= 88%). Con los totales y porcentajes podemos dar rangos para las zonas A, B y C, siendo en este caso: Para A, mayor de 10,000 soles, para B entre 10,000 y 5,000 soles y C menor a 5,000 soles. Como se aprecia un solo artículo (N367) de 6 artículos, que es el 17% de todos los artículos (1/6 = 17%), constituye el 62% del valor total del almacén, por lo que este artículo debe ser revisado en prioridad A (a pesar que su precio de venta es el menor de todos). Los demás artículos pueden ser revisados en el orden B y C, de acuerdo a la disponibilidad de tiempo. Por ejemplo, si revisamos solamente N367 y M758 (2 artículos), ya tenemos revisado el 77% del valor del almacén. De esta manera, podemos aplicar Pareto a los 1,000 artículos del almacén que vamos a revisar y priorizar lo que nosotros necesitamos.
En forma general, esto lo podemos aplicar a las distintas situaciones de la empresa, basta solo que tengamos un indicador o estadística (valor monetario, frecuencia de ocurrencias, etc.) que permita agrupar a todo lo que queramos analizar y siempre podremos encontrar esta relación que nos va a permitir enfocarnos en lo más importante, sabiendo lo que representa (20/80) y evitando gastar energías y recursos en acciones que como apreciamos, no va a representar mayores resultados o cambios en lo que deseamos obtener.